Este vino es cautivador como ciertos acordes indelebles, como un libro de relectura incansable, cual arco iris estival. Su uva garnacha ocupa la copa toda, la moldea hasta la lágrima, envuelve el paladar y la vista, estalla en mil aromas.
Bebimos Cabrida, de la D.O. Montsant, en una alhóndiga moderna, de paredes níveas, durante una cena de gustos y complicidades, de apasionado sosiego. Inolvidables, el vino y la noche. Inmensos en el recuerdo.
Cautivadora es la voz de Luis Eduardo Aute. Cualquiera de sus canciones cabría en este blog pero aparece esta por inolvidable, por imborrable, porque desde el principio de los tiempos ella siempre ha sido La belleza.