domingo, 31 de mayo de 2015

Negre De Negres


Me costó llegar a casa de P. más de un transbordo en metro y una larga caminata pero sabía que iba a merecer la pena. El pequeño J. estaba ya dormido y L. tenía que trabajar, así que al finalizar la velada me fui sin verlos. 

Bebimos este Negre De Negres, de la D.O.Q. Priorat, repleto de garnacha, cariñena, syrah y cabernet franc, mientras repasábamos el presente demoledor que nos acogía, mientras recordábamos momentos maravillosos que, entonces, nos parecían muy cercanos. Inevitablemente, I. se metió en la conversación, en los brindis, el abrazo. Probablemente terminamos hablando también de Silvio Rodríguez, otro lugar común de esta amistad.

¡Cuántas "madrugadas sin ir a dormir" llenamos los tres con canciones como De la ausencia y de ti! En esta versión de 2013 el trovador, barbudo y canoso, se aparece a su público como se abalanzan los recuerdos sobre mí.




sábado, 23 de mayo de 2015

Prado Enea


Ejemplo destacado de los grandes vinos de la D.O.C. Rioja, Prado Enea conjuga la mítica uva tempranillo con las minoritarias, pero potentes, garnacha, mazuelo y graciano para hacer de él un caldo espléndido.

Este de 2004 lo bebimos con I. y A. en una cena que tuvo el agradable sabor de un reencuentro. Creo recordar que regó un delicioso solomillo con boletus edulis. Maravilloso.

Poco después fuimos los cuatro a un concierto de The Jayhahws. Una de las canciones que disfrutamos fue este Save it for a rainy day.







lunes, 18 de mayo de 2015

Mauro



Resultaba inevitable que el primer vino de este blog fuese Mauro, de la D. O. Vino de la Tierra de Castilla y León. Creo que lo hemos compartido con todas las personas a las que queremos y que nos quieren. Lo hemos disfrutado maridado con un Txangurro a la donostiarra o en vasos que remedaban copas Burdeos.

Ella suele decir que lo tenemos sobrevalorado. Pero es un vino que no solo huele a la madera que lo alimentó o a café y cacao, que no solo sabe a la uva tempranillo que predomina o a la syrah que lo hace tan especial. Mauro es una delicia después de una siesta, es la emoción de un encuentro, es, sobre todo, el recuerdo de una noche paladeándolo mientras veíamos una película de Woody Allen.

Podemos admirar aquí al maestro con su New Orleans Jazz Band. Todo pasión.