Vemos a A. con periodicidad esperada y disfrutamos de su cariño y de lo que, con la aportación fundamental de N., nos brinda para comer y beber. Recuerdo la primera vez que catamos Capilla del Fraile, de la D.O. Vino de la Tierra de Castilla, y de la intensidad, sabor y frescura de sus uvas syrah y petit verdot. Tan deliciosas como la última.
No he conocido persona más desprendida y honrada que él. Su casa, siempre abrazadora, tiene muchos registros. En ocasiones suena a heavy metal. Disfruten intensamente de Starway to heaven, de Led Zeppelin.